Perderse por Los Ancares.

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Últimamente me estoy enganchando a las etapas maratonianas, agotadoras, con interminables tramos de bosques, cumbres, valles, incomunicados pueblos y carreteras parcheadas, con resultado de un día maravilloso y desestresante, en este tiempo de cambios y pesadumbre.

No siempre la ruta inicial es la que  más tarde se sigue pero casi mejor es la resultante porque siempre te encuentras ese valle oculto, un rincón de cuento o esas vistas desde la cumbre para una postal. Sobre la marcha, ha salido esta ruta por los Ancares profundos que junto a trasgu recorrimos sin pausa pero sin perder detalle. Siempre es agradable la buena compañia tanto para disfrutar de la jonada como apoyo en esos momentos de fatiga. 

Como el día tiene pocas horas de luz, salida antes del alba, aunque con niebla nos lo perderíamos.

 Mucho frío,  tramos con placas de hielo y con tramos de una niebla meona que ralentizaban la marcha.

Hemos dejado atrás la niebla, amenza un cielo azul y la temperatura se vuelve agradable. Tineo de despereza.

  Está en un alto desde donde divisa el valle del rio Rodical.

Continuamos por la As-217 hacia Pola de Allande. Tramos muy complicados con zonas heladas que marcan un ritmo suave. En una de las curvas noté como la rueda delantera deslizaba y por instinto apoyé el pie para enderezar la moto, asustándome no el hecho de que la rueda se saliese de la trazada prevista, sino que la bota patinaba sobre el asfalto. Bueno, supongo que si no te caes, servirá como experiencia.
     
Puerto de La Marta y parada para inmortalizar las vistas.

 Hacia Allande.

 Continuamos por la ALL-4 hacia La Braña de Santa Comba.

Carretera recien asfaltada bajo el Pico Quemaú.

Dejamos a la izquierda Braña de Campbell y ascendemos el Alto de Bustantigo.

 Un poco más tarde, el asfalto es devorado por baches inmundos más propios de otros tiempos, obligando a ir siempre atento a lo que viene pero con un interés natural muy alto.

La carretera mejora por Trabada en la As-35 camino de Castrillón. A su paso por el Rio Navia, encontramos un area recreativa de lo más interesante. El agua invade el entorno coloreando el verde en un tono más intenso. Imprescindible detenerse.Gracias al compañero de ruta pude disfrutarlo, sino sería un imposible ya que se encuentra un poco escondido.

Más adelante paramos en el embalse de Doiras. Impresiona su altura y el verde sigue envolviendo el entorno.

 Desde la presa se puede observar el Pico del Cuco con la cueva del Dome que contiene pinturas rupestres. SlowRider ya estuvo aquí.

Siguiente punto de paso, Grandas de Salime. Pero antes la niebla que todo lo moja hace acto de presencia.

 Luego por A Fonsagrada para enlazar con la cp-1901 hacia A Proba( Navia de Suarna). Carretera que pasa por mitad de pueblos agrícolas, animales en tránsito, zonas sombrías.... pero nada como el verdín en el asfalto.

 Después de atravesar Navia de Suarna y continuar por la Lu-722 no se muy bien que pasó porque nos adentramos por carreteras olvidadas, alejadas del mapa del turista sibarita, adentrándonos en bosques interminables, valles que enlazan con otros valles y carreteras a cada cual distinta.

Paramos a preguntar a los lugareños que nos animan muy amablemente a continuar por la ruta sin nosotros saber la que nos espera. Hace un rato que la cámara onboard ha dejado de funcionar y también el gps. Con todos los baches que hemos pasado alguno ha soltado la toma de corriente.  Continuamos sólo con la esperanza de divertirnos por esta nueva ruta.

Nada, continuamos. La carretera no está muy mal, la incertidumbre no se apodera y las vistas son para recrearse.

Por fín cogemos la cp-1401 y hasta Piornedo tanto la carretera como las vistas son un lujo. Tenemos fuentes donde podemos parar para recuperar fuerzas, pero mejor en verano porque suelen ser las zonas de cara el norte.
Vamos con mucho retraso así que no se puede subir al Area de Los Ancares y pasamos por Balouta hacia Murias.
Paramos para descansar de tantas curvas en mirador de Murias de Rao. Otro lujo para los visitantes por estas carreteras.

Bajada tortuosa hacia Murias. 

Sin parar y con la tarde en sus últimas horas, cogemos el camino que nos llevarán por Sena hasta San Antolín de Ibias.  No está en malas condiciones, pero hay que ir con cuidado. Parcial de Sena.

Desde el Alto podemos ver todo el valle de San Antolín de Ibias y Cuantas. Continúan las curvas de 180º.

Para para deleitarnos una vez más. Al fondo Peña Rogueira, Torrenteira y Cienfuegos nevados.

La niebla vuelve hacer acto de presencia. Subir el puerto del Pozo de las Mujeres Muertas no tuvo ninguna complicación, la noche se cerró en la bajada, dando por cloncuida una ruta de algo más de 12horas, con el cuerpo resentido por los elementos, la carretera y el cansancio, pero con la satisfacción de quien ha participado de algo agradable y enriquecedor.

Que no os lo cuenten. Id a recorrerlo.